domingo, 23 de octubre de 2016

La Guerra Fría I (1945-1953)



Hubo un tiempo en el que todo era más puro y más sencillo. Un tiempo en el que el pitido de una lucecita roja de la consola de algún lugar del mundo podía desatar un holocausto nuclear en Berlín (mismamente). Eran tiempos bellos, era la Guerra Fría.

Y hacía mucho que me había ido de la Historia Contemporánea, qué demonios.

La Segunda Guerra Mundial se había acabado, dejando buenísimos videojuegos como los Primeros Call of Duty. Tom Hanks había encontrado a Ryan y poco más había que hacer. Hasta entonces, Rusia había sido colegui de las demás potencias mientras Alemania recibía lo suyo porque había sido un niño malo. Pero cuando Alemania hubo aprendido la lección, Estados Unidos se dio la vuelta y dijo “chicos, ¿os habéis dado cuenta de que Rusia es un sucio comunista?”.

En ese momento todo el mundo fingió sorpresa (sobre todo Inglaterra, que había estado boicoteando la Rusia soviética en la guerra civil rusa) y Stalin se encogió de hombros mientras decía “pues en Yalta y Potsdam poco os importaba ¿eh?”.

Y de esta forma se dividió el mundo en dos polos de poder enfrentados entre sí: el bloque comunista y el bloque democrático. Directioners y Beliebers, pizza con piña y pizza sin piña, Pepsi y Cocacola, Apple y gente con dos dedos de frente. La rivalidad eterna. La lucha sin final.

El joven Ivan Ivanovich llega en 1945 a Berlín con media botella de vodka y una mochila llena de sueños


Bueno, que me voy por las ramas. Habiendo terminado con la Segunda Guerra Mundial, había que buscar un nuevo enemigo, EEUU tenía los humos muy subidos de tono y la URSS (pese a que tenía el área occidental hecha una pena) tenía ganas de bronca. Ahora sabemos que no ocurrió nada y que la Guerra Fría siguió siendo “fría” todo el tiempo, pero hubo un par de ocasiones de las de tirarse de los pelos y ocultarse debajo de la cama.

EEUU había lanzado las bombas atómicas y George Kennan, en su famoso “Long Telegram” opinaba que había que tener mano dura con los rojos (dicho de forma algo más elaborada, que para eso era diplomático). La URSS, por su parte, tenía su relación de amor-odio con China y buena prensa por haber liberado gran parte de Europa de los nazis, por lo que su esfera de influencia se estaba expandiendo.

Para contrarrestar la popularidad de los rusos, los americanos se sacaron de la manga el famoso Plan Marshall, una forma de decir a Europa “estáis hechos mierda, pero nos importáis”, seguido de la “Doctrina Truman” la visión del presidente estadounidense Harry S. Truman de lucha entre “pueblos libres” y “regímenes totalitarios”. Como represalia por los esfuerzos estadounidenses de reconstrucción de Alemania, Stalin empezó a construir restringir el movimiento entre las dos partes de Berlín para que todo lo bueno se quedara en la zona en la que debía quedarse para mayor gloria de Homo Sovieticus.

- ... y me pone una pilsner con la que regar la bratwurst que le he pedido antes.
- Por última vez se lo digo: esto no es una barra de bar. Estamos construyendo el Muro de Berlín, ostias.

Para aunar esfuerzos, los rusos crean la Kominform a finales de 1948, un organismo para proteger a los países comunistas emergentes de la agresión capitalista. Aunque en la práctica era un organismo para mantener la ortodoxia ideológica y purgar a aquellos que se quisieran distanciar de las políticas que dictaba Moscú y no ocurriera como con Yugoslavia, que rompió con los dictados de Stalin y se proclamó país comunista pero neutral.

Por su parte, los americanos fundan la OTAN a principios de 1949, que supone la fusión de las zonas de ocupación en las que se había separado Alemania y fundando la República Federal Alemana. Casi todos los países de la devastada Europa entran a formar parte de la OTAN para tener alguna oportunidad de supervivencia si estallaba una Tercera Guerra Mundial y los rusos venían a comerse a sus hijos. Posteriormente (1954) la URSS pidió entrar en la OTAN y los americanos aún se están riendo. En 1958 Francia protestó sobre el poco caso que le hacía la OTAN y se llegó al acuerdo de ayudar a Francia en Argelia y otros meollos a cambio de que dejara de quejarse. Y básicamente para eso sirvió la OTAN.

"La OTAN no me hace caso, pues ahora me enfado"- Famosas palabras del General De Gaule, en su intervención en la reunión de la OTAN de 1958.

En 1950 estallaba la Guerra de Corea y ambas superpotencias emplearon los conflictos en terceros países para medirse las pol… políticas internacionales. La guerra empezaría con un abrumador avance soviético y un abrumador retroceso soviético cuando intervino la ayuda internacional, para volver a avanzar un trecho los comunistas, estancándose cerca del famoso paralelo 38 hasta el final de la contienda, en 1953. Final de la quest de Corea, todos los participantes pueden volver a sus países de origen y sumarse 15 puntos de experiencia.

En 1953 moriría Stalin y se producirían profundos cambios en la Guerra Fría. Pero eso toca en la próxima actualización.

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