domingo, 27 de abril de 2014

San Jorge, un santo políticamente correcto



Escribo esto mientras me tomo el obligado té de media tarde aunque cuando acabe esto será bien entrada la noche y carezca de sentido dicha información. El día 23 de abril se celebra San Jorge, patrón de Aragón y Cataluña (entre otros), regalando un libro y una flor. Se celebra de dicha forma porque es que no queda políticamente correcto celebrar San Jorge matando un moro, por muy históricamente fidedigno que sea.

Actualmente la Iglesia católica no le ve con buenos ojos y cuestiona que deba considerarse santo, pero tiene una amplia cantera de seguidores en la Europa Mediterránea. España (en concreto los antiguos territorios de la Corona de Aragón) es su sector incondicional ya que San Jorge, a pesar de ser natural de Capadocia, parece que tenía especial predilección por aparecerse por tierras aragonesas.

San Jorge matando una especie de serpiente gorda con alas
El mito de San Jorge es ampliamente conocido: dragón aterroriza ciudad, ciudad ofrece humanos como sacrificio, princesa es ofrecida como sacrificio a dragón, dragón se intenta comer a princesa y San Jorge mata a dragón. Y lleva siendo así desde la Alta Edad Media o incluso desde antes. Pese a haberse originado  la leyenda en un lugar tan lejano como la Capadocia, llegó hasta nosotros gracias a la Leyenda Dorada (un conjunto de fábulas sobre distintos santos cristianos).

Y es que por lo visto, San Jorge deja de lado cualquier cosa que esté haciendo para hacer de turista por Aragón, como así atestigua la Crónica de San Juan de la Peña del siglo XIV:

"Et en el lugar clamado Alcorraz, delant Huesca, el rey de Caragoça con todo su poder paró sus azes et començo la batalla. (...) Et los christianos fueron muy cansados pero con la victoria que havien non lo mostraban de manera que al dia siguient cuydando haver otra batalla no vieron de los moros sino los feridos et los muertos que dieron en alcanz entro Almudebar, et quantos troboron matoron. Et este día mismo fue la batalla de Antiochia del gran peregrinage; et un cavallero de Alemanna fue entramas las batallas de Antiochía et Aragón, que en la batalla de Antiochía do andava apeado prisolo San Jorge en las ancas del cavallo; vencida aquella batalla, vinose San Jorge con el cavallero a la batalla de Huesca et vieronlo visiblement con el cavallero en las ancas"

San Jorge, identificado con la homónima cruz, matando moros de forma nada elegante en Alcoraz

Traduciendo el párrafo para aquellos que no distingan el castellano medieval de una pregunta típica de Yahoo respuestas, lo resumiré brevemente: San Jorge está en Antioquía ayudando a los cruzados de la Primera Cruzada y cuando ya no quedaban mas moros que matar por Tierra Santa les desvió decir “oye, hasta luego, que me esperan en Huesca” y se vino para Aragón a matar más moretes en la Reconquista (batalla de Alcoraz). Milagro. Jolgorio. Matanzas religiosas indiscriminadas.

Pero claro, ya estamos con ser políticamente correctos. No hay que pintar a San Jorge como una especie de superhéroe que se aparece allí donde hay musulmanes que necesitan ser erradicados, por mucho que ese sea su hobby. Por mucho que se tome tan en serio su afición que aprenda a estar en dos sitios simultáneamente para no dejar de patear culos musulmanes. Mucho mejor relacionado con rosas y libros, que no hacen daño a nadie.



Excepto a los dragones, cuyo colectivo ha estado en franca desigualdad desde siempre. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario