domingo, 27 de octubre de 2013

Hititas on fire


Una vez, en Historia Antigua, un profesor dijo que las grandes civilizaciones se tienen que juzgar por su labor legislativa. Esto es aplicable a Babilonia, con el importantísimo Código de Hammurabi: la estela tallada en diorita aun conserva las leyes por las que se regían los acadios. Gracias a ella podemos saber la estratificación social, precios de artículos básicos, salarios y funcionamiento judicial.

Esto es, si se prohíbe algo es porque se practicaba. Si dentro de 2000 años alguien desentierra las leyes municipales de una ciudad cualquiera, podrá deducir que mucha gente no aparcaba bien porque numerosas ordenanzas municipales regulan el aparcamiento. En otras palabras, las leyes prohíben prácticas frecuentes pero censurables de una sociedad.

Los hititas, otro gran imperio de Oriente Próximo, que llegaron en su máximo apogeo a poner en serio aprieto al poderoso Egipto, también eran grandes legisladores. Sin embargo, si sometemos al mismo punto de vista que a los acadios, nos sale una sociedad… curiosa.

Y semejante diversión legislativa está sacada de feas tablillas como esta

Comencemos a evaluar algunas de las leyes más extrañas para nuestra sociedad del s. XXI:

lunes, 21 de octubre de 2013

Año nuevo en la Edad Media



El paso del paganismo clásico al cristianismo medieval viene acompañado de un cambio en las representaciones del tiempo. El calendario pagano que marcaba los ritmos de la naturaleza no cambió, solo se adaptó al tiempo litúrgico cristiano. El año empezaba en diferentes fechas según las preferencias culturales de los diferentes países: Natividad, Anunciación, Semana Santa… La Iglesia lo que quería era que el año empezase en la celebración de algún hito importante en la vida de Cristo, no en enero porque era una fecha muy pagana.

Y es que enero era un mes consagrado al dios Jano, deidad romana con una cara que miraba al futuro y otra cara que miraba al pasado. Por otro lado, el primero de enero (kalendas) se celebraba en la cultura romana el día de las estrenas o strenae, un día en que el patrón daban regalos a sus clientes para asegurarse su fidelidad el año que estaba por venir. El hecho de comprar las voluntades de los hombres era totalmente contrario al pensamiento cristiano de la limosna  (desinteresada, unilateral y amorosa) y caridad cristiana. Sin contar con el inconveniente de que además generaba actitudes poco cristianas como la envidia, codicia y la soberbia. Césareo de Arles (s. V) censuraba las estrenas y proponía el cambio por una limosna  para los pobres mediante la que ganarse la vida eterna.

Sin embargo las orgías, para tristeza de muchos, no han perdurado como tradición

domingo, 13 de octubre de 2013

VI Ruta-Botellón de los Sitios: Un relato de lo acontecido



El año pasado ya escribí una reseña sobre la V Ruta-Botellón de los Sitios (actualmente en proceso de cambio de nombre a “Ruta-Botellón Histórica”, debido a las nuevas incorporaciones de periodos históricos diversos ajenos al episodio de los Sitios de Zaragoza). Dejando de lado las cuestiones de nomenclatura, siempre áridas y vacuas, nos encontramos ante la ultima (refiriéndonos a que es la más reciente, no a que sea la última-ultima, que eso hay que hablarlo). Dejemos de lado también la cuestión temporal, siempre infructuosa y vacía.

La ruta de este año empezaba la noche del 7 de octubre al 8 del mismo mes, encontrándose en la primera parada unas 30 almas con intachable gusto por el patrimonio y el alcohol. Este año la ruta era casi monotemática del liberalismo, coincidiendo casualmente con el tema de Trabajo de fin de Master del organizador de semejante evento. En la primera parada el variopinto grupo recibió la primera soflama, que hablaba del reducto inconquistable de cañizos y adobe que estaba donde ahora está el Corte Inglés. A modo de tributo solemne el organizador dejó un cartel, en los cañones que actualmente están en la plaza, en el que se presentaban los respetos a dichos heroicos defensores.

Momento Inaugural de la VI Ruta

domingo, 6 de octubre de 2013

Los felices años 20 en España (II)



El paso de siglo XIX al XX estuvo marcado profundamente por el Desastre del 98 y la pérdida de las colonias españolas de ultramar. La sensación de inutilidad rebosaba por los cuatro costados de la piel de toro: nuestro imperio en el que “no se ponía el sol” había sido reducido a poco más que la metrópoli.

Esa sensación se veía aumentado por el sistema político de la Restauración. No era un sistema democrático, a pesar de poseer España el sufragio universal desde 1890, era un sistema liberal representativo oligárquico. A la hora de votar no existía una verdadera libertad, la voluntad del pueblo se ve distorsionada por diferentes corrupciones, caciquismos locales y compra de votos. Por no hablar de que, para evitar que determinados sectores votaran, las urnas se llegaron a colocar en los tejados, lugares remotos o incluso hospitales de tuberculosos.

No hace falta que dibuje nada, ya está todo dibujado.